El contralor general de la República, Jorge Bermúdez, se refirió a la glosa de la gratuidad y al rol del organismo en la fiscalización de los recursos para la educación.

Menos de 500 funcionarios tiene la Contraloría para fiscalizar los dineros públicos en las diferentes entidades del Estado, señaló la autoridad.

En ese sentido, Bermúdez dijo que no es posible crear expectativas desmedidas sobre el rol de la Contraloría en la fiscalización de los recursos que pueden recibir las instituciones privadas de educación superior.

Lo anterior, agregó, entendiendo que la glosa sostiene que aquellas casas de estudios privadas que reciban recursos públicos, deben informar su uso a la Contraloría.

El contralor señaló que cada peso que es fiscalizado es dinero que se ahorra el Fisco, por lo que cuestionó que no se inyectaran mayores recursos para funcionarios. “Lejos de constituir un gasto, es una inversión”, añadió.

Por eso, dijo, planifican para el próximo año una auditoría a la glosa de gratuidad para poder fiscalizar esos recursos.