La recién asumida ministra de la Secretaría General de Gobierno, Paula Narváez, descartó que su llegada al gabinete sea para “desarmar” el comité político, que según la presidenta “funciona extraordinariamente bien”.
Narváez, nombrada secretaria de Estado el viernes pasado en lugar de Marcelo Díaz, realizó este lunes su primera vocería como miembro del Gobierno.
Consultada sobre su llegada y labor en el comité político, la profesional descartó que sea “desarmar” el trabajo que se viene realizando.
“Todo equipo humano, cuando sufre la llegada de una nueva persona, claro que tiene modificaciones de dinámica. Es imposible que eso no ocurra”, insistió.
Además precisó que “el concepto de desarmar no lo comparto. Yo vengo a ser un nuevo integrante, con un nuevo estilo porque soy una persona nueva, un rostro nuevo con una nueva manera de hacer las cosas, pero vengo a sumarme a un trabajo que se viene desarrollando, y que lidera la presidenta“.
Recordemos que la salida de Marcelo Díaz se debió a su aspiración parlamentaria, y no a su labor como ministro miembro del comité político, ampliamente cuestionado desde todos los sectores.
Agenda legislativa
La relación de Narváez con los partidos será puesta a prueba en la discusión de la nueva agenda legislativa que tendrá que construirse en los próximos días, ya que necesitan rebajar de 150 a 50 proyectos, que es la capacidad que tiene el parlamento para su tramitación antes de que Bachelet entregue la banda presidencial el 11 de marzo de 2018.
Para ello se prevé una larga jornada en La Moneda, pues se coordina una reunión entre el comité político y timoneles de la Nueva Mayoría para esta tarde, donde se conversará sobre este punto y se buscará sellar un nuevo trato con la Nueva Mayoría que incluya respaldar la agenda de prioridades legislativas para el 2017.
