Este martes el Gobierno ingresó al Congreso el veto presidencial aditivo al proyecto que reajusta las remuneraciones de los trabajadores del sector público, luego que La Moneda lograra finalmente obtener apoyo desde los partidos de la Nueva Mayoría.

Con este veto, La Moneda pretende reponer -tras el portazo unánime del Congreso hace una semana- el guarismo de 3,2% de reajuste y aumentar de 100 a 102 mil pesos los bonos de término de conflicto para los sueldos inferiores a 550 mil pesos.

Primero, se dio cuenta del veto en la Sala de la Cámara y luego fue aprobado por la Comisión de Hacienda de la misma corporación. Posteriormente volverá a la Sala para su votación, a eso de las 16:00 horas, y finalmente iría a la Sala del Senado. “Todos esperamos hacerlo con la debida celeridad, pero manteniendo el respeto por las instituciones”, subrayó el ministro secretario general de la Presidencia, Nicolás Eyzaguirre.

“Podemos sentirnos optimistas, porque con los presidentes de los partidos de la Nueva Mayoría hemos llegado a un principio de acuerdo. Se está introduciendo el veto aditivo, porque para la Presidenta lo que es importante es que los trabajadores y trabajadoras del sector público tengan su reajuste y sus bonos”, aseguró el secretario de Estado.

Pero no hubo un apoyo unánime. Desde el Partido Comunista pusieron en duda sus votos, disconformes con el monto anual de reajuste. Es por eso que el presidente de la tienda, Guillermo Teillier, sostiene reuniones con sus parlamentarios y con ministros para analizar los pasos a seguir.

Las opciones que maneja la bancada comunista es votar en contra o, al menos, abstenerse. Cada diputado votaría de manera individual y no en bloque.

Cifra cuestionada y paro nacional

Eyzaguirre recalcó que el Ejecutivo está “plenamente consciente de las necesidades económicas que tienen las y los trabajadores y estamos haciendo nuestros mayores esfuerzos dentro del contexto económico que hoy día vivimos para garantizar mejorías en su poder adquisitivo”, ya que, según señaló, hay diferentes necesidades en el país “que hay que equilibrar adecuadamente, porque todos merecen un lugar en la mesa”.

Por su parte, el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, calificó como una buena noticia para este proceso el aumento del IPC en 0,2%, lo que a su juicio “hace que el reajuste real sea una décima mayor de lo que se tenía presupuestado”.

En tanto, desde la dirigencia de los funcionarios públicos calificaron como “una triste noticia” el acuerdo oficialista. El presidente de la Confusam, Esteban Maturana, dijo esperar que la mayoría de los parlamentarios “mantengan su coherencia y consecuencia” y voten en contra del veto aditivo.

Ante este escenario, la Mesa del Sector Público y la ANEF estarían evaluando prolongar de manera indefinida el paro nacional que mantienen desde el 26 de octubre. Hasta ahora confirmaron que la movilización se mantendrá, al menos, durante la tramitación del veto en el Congreso.