El senador, Alejandro Navarro, presentará una moción de reforma constitucional que modifica el artículo 25 de la Constitución Política, disminuyendo a 30 años la edad requerida para ser electo presidente de la República.

Navarro explicó que “en el marco de la altísima abstención que hubo en la elección municipal, me he formado la convicción de que debemos eliminar cualquier tipo de barrera que limite el ingreso de las y los jóvenes a cargos de representación popular”.

En este sentido agregó que “tenemos directores de servicio, seremis, y diputados como Giorgio Jackson, Gabriel Boric, Karol Cariola, Camila Vallejo o Vlado Mirosevic, que teniendo treinta o menos años, han demostrado estar capacitados para ejercer altos cargos en política, y la presidencia no debe ser la excepción y discriminarlos por edad”.

Navarro argumentó que “el desapego de la ciudadanía con la política muchas veces dice relación con la falta de liderazgos que inyecten nuevos aires a la política, liderazgos capaces de capturar a los sectores que se abstuvieron de votar al no sentirse representados por ningún candidato”.

“Es así como jóvenes como Jorge Sharp en Valparaíso o de Edgardo González en Llay-Llay, lograron cautivar a un sector que en la mayoría de las comunas se abstuvo de votar”, agregó.

Cabe señalar que actualmente en nuestro país la mayor proporción de personas habilitadas para votar se encuentra entre los 20 y 34 años, representando a un tercio del electorado, sin embargo los jóvenes son los que más se abstienen de votar, alcanzando el 80% en la pasada elección presidencial.

Sin embargo, según cifras del Injuv, la mayoría de los jóvenes (90,3%) cree que como grupo etario son un aporte para la sociedad y 89,9% cree que debiesen tomarse medidas para mejorar su participación en ella.

Recordemos que a nivel Latinoamericano países como Argentina, Bolivia, Colombia, Venezuela y Costa Rica han fijado en 30 años la edad requerida para presidir el país.

Finalmente, el parlamentario manifestó que espera que “este proyecto tenga apoyo de todos los sectores” para “pasar a un sistema democrático que integre y no discrimine a todos quienes quieran postular a un cargo de representación popular, cualquiera sea este”.