El fiscal regional Centro Norte, Andrés Montes, negó haber advertido al Gobierno sobre la incautación de los computadores que usó Javiera Blanco en el Ministerio de Justicia en la indagatoria por las pensiones en Gendarmería. Además, descartó imputaciones hacia la exsecretaria de Estado.
El fiscal regional centro norte, Andrés Montes, se refirió a la incautación del computador que utilizaba la ahora ex ministra de justicia Javiera Blanco en su despacho y a la entregar de un aparato portátil que hizo ayer la ex secretaria de Estado en la Fiscalía de Antofagasta.
Confirmó que se trata de diligencias encomendadas por la fiscal de alta complejidad, Tania Sironvalle, quien investiga las denuncias por las millonarias pensiones otorgadas a funcionarios de Gendarmería.
“Aquí no hay una investigación a la ministra, no está en calidad de imputada, aquí lo que se le ha pedido es la entrega del computador en forma voluntaria con el objeto de que, si es necesario, más adelante, contar con esa información para que esté disponible” explicó Montes, quien además descartó que se haya informado previamente al gobierno de esta diligencia.
El fiscal regional metropolitano aclaró que estas “tienen que ver con la necesidad de preservar la evidencia. Cuando hay cambio de autoridades muchas veces se procede a ‘resetear’ los computadores o reasignar ese computador a otra persona. Lo que se buscaba acá es mantener disponible esa información”.
El persecutor reveló además que en julio pasado, cuando renunció el entonces director nacional de Gendarmería, Tulio Arce, la fiscalía también obtuvo los computadores que utilizaba esta autoridad en sus oficinas.
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El fiscal nacional, Jorge Abbott, lamentó la salida de la ministra Blanco, a quien manifestó su “aprecio”.
Según fuentes consultadas por Radio Bío Bío, la Fiscalía aplicó una especie de protocolo: incautar siempre los computadores de las autoridades que dejan su cargo, cuando exista una investigación que lo amerite.
Esto comenzó a partir desde que se borró la información del disco duro del computador que usaba en La Moneda, Sebastián Dávalos, hijo de la presidenta Michelle Bachelet.
