Saber elegir y combinar los colores de la ropa según tu tono de piel, no es algo meramente superficial, ya que nos puede hacer ver más alegres, atractivos e incluso más llamativos, ayudándonos por ejemplo en hacer notar nuestra presencia en la oficina o en una reunión con clientes.

Para esto la asesora de imagen, Isis Miralles, quien también es la creadora del blog Consultora de Imagen, entrega algunas claves para que sea más fácil la tarea de vestirte bien, dando vida a tu cuerpo y aprovechando las prendas de tu clóset.

“Lo primero es tener en cuenta factores como tu color de cabello y de piel, pues los tonos que uses en tu ropa deben ser un complemento. Se distinguen básicamente tres tonalidades de piel, las blancas o claras, las intermedias y las oscuras o morenas; todas con pros y contras que deben tenerse en cuenta al momento de elegir”, dice la experta.

“Recuerda que una buena combinación logra resaltar cualidades, mientras que una desacertada puede lograr el efecto contrario”, explica Isis, quien además entrega los siguientes tips según tu tipo de piel.

Pieles claras

Para las personas más blancas con tintes rosas los colores brillantes como el rojo, el azul YSL, el morado, el gris, el negro y el azul oscuro son excelentes complementos para su tono natural.

Pieles intermedias

A quienes tienen un tono de piel intermedio con tintes amarillos les quedan muy bien colores como el beige, los dorados y tonos tierra.

Pieles oscuras

Mientras que las y los morenos deben buscar tonos que contrasten y resalten su tono de piel; los ideales son los más brillantes como los amarillos, naranjas, verdes y las tonalidades claras como el beige.

Cómo combinar

Blanco: Combina bien con todo pero idealmente con tonos oscuros pues dan mayor contraste; estos son el negro, gris y azul oscuro.

Sin embargo, no deseches tonos como el azul, verde y otros colores brillantes que se vuelven un excelente complemento.

Negro: El aliado perfecto de los colores claros como el beige y blanco, y también perfecto para tonos brillantes como el rojo, morado y otros cálidos como el amarillo y naranja.

Azul marino: El contraste ideal para tonos oscuros como el café y gris, además de combinar muy bien con el blanco, beige y otros como el rosado, terracota y verde oliva. Al igual que el negro ambos ayudan a estilizar la figura.

Gris: Combina casi con todo y hace el match perfecto con el negro, blanco, beige y azul en todas su gamas. Aunque ojo, cuanto más claro, mayor volumen dará a nuestro cuerpo.

“Si bien hay muchas combinaciones de colores, lo importante es arriesgarse y darle un vuelco a tu estilo”, finaliza Isis Miralles.