Ser un personaje público es una labor compleja: todo lo que diga o haga es enjuiciado por miles o millones de ojos, motivo por el que hay que cuidar meticulosamente la línea entre lo privado y lo público.

La actriz Anne Hathaway se percató de lo anterior demasiado tarde. El pasado 9 de marzo la intérprete compartió en su cuenta de Instagram una fotografía de Jonathan Rosebanks Shulman, su hijo de 1 año, de espaldas.

A pesar que en la foto no se distingue el rostro del menor, Anne admitió que se arrepiente profundamente de lo que hizo.
“Casi nada más hacerlo, habría deseado no haberlo hecho”, expresó la actriz a The Huffington Post.

Lee también: Hillary Duff responde a quienes la criticaron por besar en los labios a su hijo

“Creo que a veces tienes que cometer errores para poder ver las cosas con claridad”, señaló la mujer que suele ser bastante discreta con su vida íntima. “Sentí que había roto un acuerdo invitando a la gente a mi vida”, confesó.

A pesar de la polémica, la actriz de 34 años no retiró la imagen de Jonathan de su cuenta, la que suma más de 143 mil ‘me gusta.