El uso de los medicamentos no está exento de ciertos riesgos, incluso aquellos de origen natural. En la actualidad se conocen muchos efectos negativos al feto en desarrollo por la exposición a ellos y a productos químicos ambientales.

Hace más de 40 años se desató la catástrofe por el uso de talidomida, utilizada como sedante e hipnótico en el primer trimestre del embarazo para tratar la ansiedad, vómitos y náuseas. Este medicamento produjo malformaciones en muchos fetos.

“Es importante destacar que el organismo de la mujer frente al embarazo se modifica notoriamente y, por lo tanto, las concentraciones en la sangre podrían llegar a comprometer la eficacia de los medicamentos”, comenta la Dra. Clarissa Gondim, académica Química y Farmacia de la Universidad San Sebastián.

Es importante destacar que los potenciales riesgos no terminan con el parto, sino que también se extienden durante la lactancia. De acuerdo a la especialista “durante la lactancia materna la solución evidente de evasión del riesgo para el bebé, es la abstinencia de sustancias por parte de la mujer, pero desde el punto de vista pragmático esta medida sería imposible de implantar”.

“Otra forma de evitar estos posibles riesgos para el lactante es informar a la madres acerca de la utilización de fármacos, lo cual debe ser realizado por un equipo de salud compuesto el médico tratante, matrona, enfermera y químico farmacéutico”, agrega.

Para usar correctamente los medicamentos la Dra. Clarissa Gondim aconseja:

  • Tener absoluta claridad sobre la necesidad del medicamento para la madre.
  •  La utilización de medicamentos en el embarazo y lactancia debe ser mediante prescripción médica, incluso cuando la madre tenga que utilizar un medicamento para un sencillo dolor de cabeza.
  • Tomar mayores precauciones con los analgésicos opioides, antibióticos/antimicrobianos, psicofármacos, antihipertensivos, anticoagulantes, fármacos para procesos alérgicos (ejemplo: asma bronquial), antidiabéticos, antiepilépticos, fármacos para patología tiroidea y suplementos vitamínicos.
  • Conocer el riesgo que conlleva el empleo de un medicamento durante el embarazo es vital para disminuir las posibles complicaciones.
  • La clasificación más aceptada respecto al uso de medicamentos durante el embarazo es la publicada por la Food and Drug Administration (FDA), que los cataloga por sus riesgos, pero valorando también los beneficios.
  • Respecto al uso de medicamentos en el período de lactancia, no existe una unidad para utilizar una clasificación única.
  • Utilizar el medicamento que sea más seguro en período de lactancia.
  • Si se decide prescribir un medicamento que implica riesgo para el lactante, idealmente se deben conocer las concentraciones que se transfieren a la leche e inferir el índice de exposición.