“No va a haber una guerra en la península de Corea”, dijo este jueves el presidente surcoreano Moon Jae-In, que dijo que va a impedir a toda costa un conflicto, pese a las tensiones en torno al programa de misiles de Pyongyang.

“Todos los surcoreanos han trabajado tan duro, todos juntos para reconstruir este país desde las ruinas de la Guerra de Corea”, dijo Moon en una conferencia de prensa para marcar los primeros 100 días de su mandato. “Yo voy a impedir la guerra a toda costa”, agregó.