El mundo registró el martes un récord de más de medio millón de contagios de covid-19, según el recuento realizado por la Agence France-Presse este miércoles a partir de balances de las autoridades sanitarias.

En total se declararon 516.898 nuevas infecciones y 7.723 fallecidos. Este aumento del número de casos en el mundo no puede explicarse solamente por el incremento de test realizados desde la primera ola mundial de la epidemia entre marzo y abril.

Mas de la mitad de los casos registrados en 24 horas se ubican en los diez países mas afectados: Estados Unidos, India, Brasil, Rusia, Francia, España, Argentina, Colombia, Reino Unido y México.

Europa es el continente donde la pandemia progresa más rápido, con una media diaria superior a 220.000 nuevos contagios en los últimos siete días, un aumento del 44% con respecto a la semana anterior.

En un momento en que varios países europeos están incrementando las restricciones para controlar esta segunda ola, la región se acerca a los 2.000 fallecidos al día. Durante lo más crudo de la pandemia, en abril, se registraron más de 4.000 muertos diarios.

Estados Unidos también está viviendo un incremento en el número de casos detectados. Por primera vez han tenido más de 500.000 infectados en una semana, mientras que durante la semana precedente eran 370.000.

Alemania y Francia refuerzan medidas

El acelerado avance de la pandemia de covid-19 en Europa llevará a Francia y Alemania a anunciar este miércoles un endurecimiento de sus medidas sanitarias, siguiendo el ejemplo de otros países como Italia, donde crece el malestar ante restricciones cada vez más draconianas.

En Francia, donde dos terceras partes de su población ya están bajo toque de queda nocturno, el presidente Emmanuel Macron dará a conocer en la noche nuevas medidas que se anuncian “impopulares”, según un consejero ministerial, como un eventual reconfinamiento.

Serán decisiones “difíciles”, admite el gobierno, aunque el reconfinamiento sería menos estricto que el de la primera ola, pues las escuelas y servicios públicos seguirían abiertos.

El temor es ante todo la saturación de las unidades de cuidados intensivos, donde ya están ocupadas más de la mitad de las 5.800 camas disponibles, en un país con un récord promedio de 50.000 contagios diarios, que ya superó los 35.000 muertos y el millón de casos de covid-19.

El dilema sigue presente. El reconfinamiento es una “medida drástica” indispensable porque el virus “está fuera de control”, dijo el infectólogo francés, Gilles Pialoux. Desde el empresariado se advierte que si esa medida se aplica totalmente como en la primavera “hundirá la economía”.

También contra la espada y la pared, la vecina Alemania planea nuevas medidas, con el cierre por un mes de bares, restaurantes y centros deportivos y culturales, según propuestas que discutirá este miércoles el gobierno de Angela Merkel, favorable, de acuerdo con la prensa, a un reconfinamiento “light”, con escuelas abiertas.

Con cerca de 11.000 muertos, Alemania está -como en primavera- mejor que Francia, España o Italia. Pero las nuevas infecciones alcanzaron un récord cercano a 15.000. “Debemos tomar decisiones rápidas y firmes para romper esta segunda ola de contaminación”, dijo el vicecanciller alemán Olaf Scholz.

Otros países de Europa están en una trayectoria parecida, como la República Checa, donde este miércoles entra en vigor un toque de queda nocturno.