El Gobierno australiano anunció este lunes un paquete de subsidios salariales de 130.000 millones de dólares australianos (80.163 millones de dólares estadounidenses) para que las empresas sigan pagando los salarios de hasta 6 millones de personas durante la crisis de la COVID-19.

“Vamos a comprometer 130.000 millones de dólares en los próximos seis meses para apoyar los empleos y el estilo de vida de lo que calculamos serán unos seis millones de australianos que necesitarán este salvavidas en los próximos meses”, dijo el primer ministro australiano, Scott Morrison, a periodistas en Camberra.

Mediante este plan, el Gobierno dará a las empresas un pago quincenal por cada trabajador de 1.500 dólares australianos (924 dólares estadounidenses) sin hacer distinciones respecto al monto que percibían o si sus empleos eran a jornada completa, parcial, ocasional o se trata de un contratista independiente.

El gobierno espera que la mitad de los empleados de Australia sean subvencionados.
Asimismo, el gobierno tendrá que convocar al Parlamento para aprobar el gasto.

La medida eleva el apoyo económico total del gobierno a la respuesta al virus a 320.000 millones de dólares australianos (196.000 millones de dólares)
, lo que representa el 16,4% del PIB.

Los bancos australianos anunciaron el lunes que el 98% de las empresas con préstamos bancarios tienen derecho a un aplazamiento de seis meses de los reembolsos de préstamos por valor de 250 mil millones de dólares australianos.