El presidente de Rusia, Vladimir Putin, firmó el pasado sábado la amplia reforma constitucional que le permitiría cumplir dos mandatos más, enmienda que la oposición denuncia con vehemencia, informó la agencia oficial TASS.

La atención mundial al coronavirus crece con el paso de las horas. Pero en Rusia, tanto la clase política como los ciudadanos, están a la expectativa de los recientes acontecimientos impulsados desde el legislativo, que avaló reformas que encaminarían al mandatario a asegurarse una buena estadía en el Kremlin.

El servicio de información jurídica de la federación de Rusia publicó en su sitio web una ley de 68 páginas que resume todos los cambios constitucionales, lo que indica que han sido aprobados por el presidente de Rusia.

La reforma debe ahora ser validada por el tribunal constitucional en el plazo de una semana, según la ley rusa que prevé un procedimiento legislativo específico para este tipo de medidas.

El paso para consolidar la prolongación de su mandato

A continuación, el texto debe ser aprobado definitivamente en una “votación popular” prevista para el 22 de abril.

La presidenta de la Cámara Alta del Parlamento ruso, Valentina Matvienko, aseguró el sábado a la prensa que la votación debía mantenerse “a pesar de las diversas preocupaciones relacionadas con el coronavirus”.

En las últimas semanas, las especulaciones afirmaban que el Kremlin procedería a una votación en línea, una eventualidad denunciada por la oposición que teme que permita fraudes masivos.

Una de las enmiendas, propuesta el martes, permitirá a Vladimir Putin reanudar el número de sus mandatos presidenciales para que pueda volver a presentarse en 2024 y 2030.

La oposición rusa denunció una “usurpación del poder”.

La reforma fue rápidamente validada por el Parlamento.

También refuerza los poderes del ejecutivo y ratifica una visión conservadora de Rusia con la mención de la “fe en Dios” y el principio de un matrimonio posible sólo entre un hombre y una mujer.

En San Petesburgo, polícias detuvieron a un grupo de manifestantes que salieron a las calles a condenar lo que ellos llaman la intención del mandatario de lo que llam perpetuarse.

OLGA MALTSEVA / AFP
OLGA MALTSEVA / AFP