Australia ha confirmado este sábado un primer caso del coronavirus que apareció en China, donde causó la muerte de 41 personas.

El paciente, un hombre sobre el que no se han dado detalles, llegó a Melbourne hace una semana desde la ciudad de Wuhan, el epicentro de la epidemia, anunciaron las autoridades australianas.

Según Brendan Murphy, responsable de salud pública del gobierno australiano, las autoridades del estado de Victoria siguieron “estrictamente los protocolos, incluido el aislamiento del afectado”.

“Creo entender que el paciente padece neumonía y se encuentra en estado estable”, afirmó.

El ministro de Salud australiano, Greg Hunt, afirmó que los pasajeros del vuelo en el que viajó este hombre fueron contactados “para brindarles información y consejos”.

El nuevo coronavirus apareció en diciembre en un mercado de Wuhan, en el centro de China. Según el último balance oficial chino, ha causado 41 muertos en el país y casi 1.300 personas han sido contagiadas.

El virus también se ha propagado fuera de las fronteras. Una decena de países han señalado casos, entre ellos Francia y Estados Unidos.

Un caso sospechoso, un hombre que también regresaba de Wuhan, fue registrado el martes en el estado australiano de Queensland. Se le están realizando pruebas para determinar si es portador del virus.

La epidemia aumenta el temor de que se repita el SRAS (Síndrome Respiratorio Agudo Severo), un virus similar que causó la muerte de unas 650 personas en China continental y Hong Kong entre 2002 y 2003.

Los expertos en salud han informado de casos de transmisión humana del nuevo virus, en particular en Wuhan. Esta ciudad de 11 millones de habitantes fue puesta en cuarentena en un intento de contener la epidemia. Otros municipios han seguido sus pasos y ahora la medida afecta a más de 40 millones de personas.