La directora adjunta de la ONG Oxfam, Penny Lawrence, renunció este lunes tras asumir la “entera responsabilidad” por el escándalo desatado después de conocerse que dirigentes de esa organización recurrieron a los servicios de prostitutas en Haití.

Tras señalar su “tristeza” y “vergüenza” por “la conducta de empleados en Chad y Haití (…) incluyendo la relación con prostitutas”, Lawrence anunció su renuncia y dijo “asumir la entera responsabilidad”.

Lawrence explicó que los comportamientos inapropiados “del director (de la ONG) en Chad y su equipo” ya habían sido “señalados antes de ir a Haití”. “No respondimos de forma adecuada”, reconoció.

Según el diario The Times, después del terremoto de 2010 que devastó Haití, grupos de jóvenes prostitutas fueron invitadas a casas pagadas por esta organización en la isla. Una fuente citada por este medio aseguró que vio imágenes de una orgía en la que las trabajadoras sexuales tenían camisetas de Oxfam.

El periódico volvió al caso este lunes, estimando que la ONG “ignoró las advertencias” y nombró a su responsable en Haití, el belga Roland van Hauwermeiren, “a pesar de las preocupaciones (suscitadas) por su comportamiento hacía las mujeres” durante su trabajo en Chad.

Oxfam, una confederación de organizaciones humanitarias con base en Reino Unido, afirmó que inició inmediatamente, en 2011, una investigación interna. Cuatro trabajadores fueron despedidos y otros tres dimitieron antes del final de la investigación, aseguró la ONG, entre ellos Van Hauwermeiren.

‘La punta del iceberg’

Pero según la Comisión Caritativa, organismo que controla las organizaciones humanitarias en Reino Unido, Oxfam no informó, en aquel entonces, de posibles abusos o ofensas sexuales cometidos por sus equipos.

“Nuestra reacción habría sido diferente si todos estos detalles mencionados por la prensa nos hubieran sido comunicados en ese momento”, escribió la Comisión, que pidió a Oxfam que le transmitiera informaciones adicionales “urgentemente”.

La secretaria de Estado de Desarrollo Internacional británica, Penny Mordaunt, se reunió el lunes con responsables de la ONG, a la que amenazó de no suministrarle más financiación si no le proporcionaba todas las informaciones relacionadas con este caso.

Oxfam recibió 31,7 millones de libras (35,7 millones de euros, 43,8 millones de dólares) en subvenciones del gobierno británico en 2016/2017, una suma que representa casi el 8% de sus recursos anuales.

El domingo, la nueva presidenta del consejo de administración de Oxfam, Caroline Thomson, pidió disculpas y anunció una batería de medidas para reforzar la prevención y la gestión de los casos de abusos sexuales.

“Continuaremos ocupándonos de los problemas culturales subyacentes que permitieron este comportamiento”, aseguró en un comunicado, añadiendo que la organización tenía “ahora una cultura de apertura y de transparencia” y “había aprendido de los acontecimientos de 2011”.

La ex secretaria de Estado de Desarrollo Internacional Priti Patel afirmó por su parte que los casos de abusos sexuales no afectaban sólo a las ONGs. “El mismo secretario general de la ONU declaró el año pasado que había al menos 120 casos implicando más de 300 personas, y sólo es la punta del iceberg”, explicó a la BBC radio 5.