Los líderes palestinos se volvieron a reunir este lunes para intentar dar una respuesta a las últimas ofertas del presidente estadounidense Donald Trump sobre un plan de paz israelo-palestino, que rechazan sin fisuras.

En un discurso en el que no ocultó su enojo, el presidente palestino, Mahmud Abas, marcó la pauta para la reunión de dos días del Consejo Central de la Organización de Liberación de Palestina (OLP).

“El asunto del siglo se ha convertido en una bofetada del siglo”
, lanzó Abas al referirse a la proclamada voluntad de Trump de presidir el “último acuerdo” diplomático entre israelíes y palestinos, después de que generaciones de presidentes y diplomáticos se hayan quedado en el intento.

El Consejo Central de la OLP, uno de los órganos de la organización reconocida internacionalmente como representante de todos los palestinos, fue convocado expresamente para responder a la decisión anunciada el 6 de diciembre por Trump de reconocer a Jerusalén como la capital de Israel.

Esta ruptura unilateral con el trabajo diplomático realizado durante décadas desde Estados Unidos y la comunidad internacional, desató una nueva espiral de violencia que dejó 16 palestinos muertos.

Los palestinos interpretaron esta decisión de Trump como una negación de las demandas palestinas sobre Jerusalén Este, anexada y ocupada. También consideraron esta postura de Washington como la manifestación más flagrante de su parcialidad proisraelí.

Desde que Trump llegó al poder en enero de 2017, se abstuvo de apoyar la creación de un Estado palestino, fue más que discreto sobre la colonización israelí y estuvo apunto de cerrar una oficina de la OLP en Washington.

También ha amenazado con cortar la ayuda estadounidense a los territorios palestinos porque rechazan las negociaciones de paz.

“¿Cuándo nos hemos negado?”, se preguntó indignado Abas. “Dios destruya tu casa”, dijo a Trump, utilizando una expresión común en árabe.

Abas enfatizó que Estados Unidos no tenía las credenciales para desempeñar rol alguno como mediador de paz. “Le decimos a Trump que no aceptaremos su plan”, afirmó.

Sin margen de maniobra

Se espera que los estadounidenses presenten en un plazo aún incierto un plan para tratar de revivir un acuerdo de paz. Sin embargo los palestinos congelaron todo tipo de contactos desde diciembre.

El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, visitará Jerusalén la próxima semana, pero no se reunirá con ningún líder palestino.

De su lado Abas se ha mostrado favorable a un proceso con mediación internacional.

Para este lunes el consejo central de la OLP tendría que alcanzar una declaración común, pero entre la presión estadounidense y las divisiones palestinas, el margen de maniobra de la organización parece bastante limitado.

Abas aseguró que el proceso de paz de Oslo fracasó por culpa de Israel y que todas las opciones estaban sobre la mesa.

Sin embargo, no se refirió a dos posibilidades que se habían mencionado antes de la reunión de la OLP: el fin del reconocimiento de Israel o la cooperación de seguridad con los israelíes.

El movimiento islamista Hamas, que no forma parte de la OLP y que rechazó la invitación a la reunión, acusó a Abas de “no satisfacer las ambiciones de nuestro pueblo”, en un comunicado.

Por otra parte, parece muy poco probable que Israel acepte otro intermediario que Estados Unidos.