Una mujer de 30 años fue decapitada por un grupo de talibanes en la provincia de Sar-e-Pul, al noroeste de Afganistán, denunciaron autoridades locales.

“Le cortaron la cabeza tras ser acusada de haber ido sola a hacer la compra al mercado de su población”, declaró a medios locales, Zabiullah Amani, gobernador de Sar-e-Pul, según consigna diario El Mundo de España.

De acuerdo a lo informado por la jefa provincial del Departamento de Asuntos para la Mujer, Nasima Arzoo, la víctima fue atrapada por elementos ligados a grupos talibanes, con quienes habría mantenido una fuerte discusión.

“La decapitación se llevó a cabo con la bayoneta de un fusil de asalto AK-47, después de que la mujer fuera detenida por elementos ligados a los talibanes con los que mantuvo una discusión”, reveló Arzoo.

Sar-e-Pul es una provincia que ha estado bajo el control de grupos talibanes desde 1998, por lo que las autoridades prácticamente no tienen posibilidad alguna de arrestar a quienes ejercen este tipo de violencia.

De igual modo, los grupos talibanes en esta zona de Afganistán han negado estar involucrados con este crimen, aunque algunas leyes islámicas contemplan “latigazos o la ejecución” a las mujeres que aparecen en público sin la compañía de un miembro masculino de su familia.