El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, advirtió este martes que la batalla será “difícil” para retomar el control de la ciudad iraquí de Mosul, actualmente en manos del grupo Estado Islámico (EI), que perdió terreno en el segundo día de esta vasta ofensiva.

“Mosul será una batalla difícil. Habrá progresos y habrá retrocesos”, afirmó Obama, aunque se dijo “confiado” en que el EI será derrotado en esta ciudad y “esto será un paso en la dirección a su destrucción completa”.

Estados Unidos dirige una coalición internacional que apoya las fuerzas iraquíes en este operación lanzada el lunes para reconquistar Mosul, en manos del EI desde junio de 2014.

Sin embargo, en un video divulgado el martes por su agencia de propaganda, el EI prometió la “derrota” de Estados Unidos en Irak. En las imágenes se puede ver a un combatiente yihadista en las calles de Mosul proclamando: “Respecto a ti, Estados Unidos (…) juramos por Dios que te venceremos en Irak y te haremos salir derrotado y humillado” de este país.

Antes de alcanzar las cercanías directas de Mosul, donde estarían atrincherados entre 3.000 a 4.500 yihadistas fuertemente armados, las fuerzas iraquíes atravesarán territorios controlados por el EI alrededor de la ciudad.

Las fuerzas leales al gobierno de Bagdad avanzan desde Qayyarah, así como desde Jazir, hacia Mosul, último gran bastión del EI en Irak.

Los mandos iraquíes indicaron que los combatientes del EI respondían con atentados suicida pero que la ofensiva iba avanzando como estaba previsto.

“Muchas localidades fueron liberadas”, indicó a la AFP Sabah al Numan, portavoz de los servicios antiterroristas iraquíes, una de las unidades de élite movilizadas.

“Alcanzamos nuestros primeros objetivos e incluso más, pero somos prudentes y nos ceñimos al plan”, agregó.

‘Venganza contra la población’

En Mosul, un habitante describió la atmósfera “extraña” y las calles vacías. “El cielo está siempre ennegrecido por el humo de los neumáticos quemados por los yihadistas”, explicó por teléfono Abu Saif, de 47 años.

“En el fondo, estamos contentos porque estamos a punto de ser liberados pero tenemos miedo que Dáesh (Estado Islámico) se vengue contra la población“, advirtió.

La coalición internacional afirmó que 52 objetivos fueron destruidos en el primer día de la ofensiva.

El primer ministro turco,Binali Yildirim, afirmó por su lado que aviones turcos se habían unido a las fuerzas aéreas que apoyan el dispositivo.

El ministro de Defensa francés, Jean-Yves Le Drian, advirtió por su parte que la batalla puede durar “varias semanas”, o quizás “meses”. Su homólogo británico, Michael Fallon, también estimó que “no será una operación rápida”, y que se esperaba que el EI lucharía “con ensañamiento”.

A través de esta ofensiva, el ministro iraquí de Relaciones Exteriores, Ibrahim Al Jaafari, dijo que su país se defendía pero que también era una lucha por la “democracia”.

Esta batalla de Mosul hace temer un éxodo masivo de población.

Unas 1,5 millones de personas viven todavía en Mosul y podrían verse atrapadas en medio de los violentos combates o ser utilizadas como escudos humanos por los yihadistas, como hicieron en otras ciudades que perdieron en Irak en los últimos meses.

El Pentágono expresó su preocupación por la seguridad de los civiles, recordando que el EI impedía que salieran de la ciudad. “Están siendo retenidos contra su voluntad” por los yihadistas y los utilizan como “escudos humanos”, declaró el portavoz del Pentágono, Jeff Davis.

La coordinadora humanitaria de la ONU para Irak, Lise Grande, declaró el lunes que todavía no hay mucha gente que huya de Mosul, pero se refirió a la posibilidad de que haya “importantes movimientos de poblaciones (…) de aquí a cinco o seis días”.

‘Preparar refugios’

Unas 200.000 personas podrían desplazarse “en las dos primeras semanas”, cifra que puede aumentar significativamente a medida que avance la ofensiva, según la ONU.

“Las agencias humanitarias preparan refugios en tres regiones prioritarias en el sur de Mosul donde serán albergados los primeros desplazados”, añadió la ONU.

Amnistía Internacional (AI) pidió este martes a Irak que garantice que sus fuerzas de seguridad y las numerosas milicias paramilitares no cometan abusos con los civiles.

La pérdida de Mosul podría producir un flujo hacia Europa de combatientes yihadistas “dispuestos a actuar”, advirtió el martes el comisario europeo para la seguridad, Julian King, en una entrevista al diario alemán Die Welt.

El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) advirtieron, por su parte, que se preparaban para tener que hacer frente a un posible uso de armas químicas en la ofensiva.