Al menos cuatro personas murieron el miércoles en un atentado suicida cerca de Bagdad reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico (EI), el último en una larga serie de ataques contra lugares públicos alrededor de la capital iraquí.

La explosión de un coche bomba al nivel de un puesto de control en dirección al barrio de Huseiniyah, al norte de la ciudad, dejó asimismo 21 heridos, según responsables.

El EI afirmó en un comunicado que un kamikaze iraquí había sido el autor del atentado, aunque señaló como lugar del ataque el barrio de Al Shaab, vecino al de Huseiniyah.

El EI, un grupo ultrarradical sunita, se ha responsabilizado de numerosos atentados en la región de Bagdad, incluido el de un minibús bomba que dejó cerca de 300 muertos el 3 de julio. Tres días más tarde, un nuevo ataque mató a 40 personas en un mausoleo chiita en Balad, al norte de la capital.