El gobierno libio de unidad nacional descartó este domingo una amnistía para las personas acusadas de crímenes contra la humanidad, entre ellos Saif al Islam Gadafi, hijo del dictador derrocado.
El Consejo Presidencial del gobierno de unión “condenó” el domingo en Facebook las declaraciones “irresponsables del jefe de la brigada encargada de supervisar la prisión, donde está encarcelado Saif al Islam” en la ciudad de Zenten.
Recientemente, este responsable de seguridad había dejado entrever que el hijo de Muamar Gadafi podría beneficiarse de una amnistía.
“No puede haber una prescripción de los crímenes contra la humanidad, de los que debe responder Saif al Islam (…), ni una amnistía”, aseguró el Consejo Presidencial.
La ciudad de Zenten, situada a 170 kilómetros al suroeste de Trípoli, está controlada por grupos armados opuestos al gobierno de unidad nacional, cuya sede está en Trípoli.
Aunque la comunidad internacional lo reconoce, este ejecutivo de unión tiene dificultades para extender su autoridad al conjunto del país, donde rivaliza con otro gobierno no reconocido con sede en el este.
Los abogados de Saif al Islam habían afirmado recientemente que su cliente había sido liberado en virtud de una amnistía decretada por las autoridades libias rivales del gobierno de unión nacional.
Sin embargo, las autoridades de Zenten aseguraron el viernes que el hijo de Muamar Gadafi seguía encarcelado en esta ciudad, desmintiendo las informaciones sobre su liberación.
Las autoridades libias y la Corte Penal Internacional se disputan el derecho de juzgar a Saif al Islam Gadafi, quien está acusado de cometer crímenes contra la humanidad durante los ocho meses de revuelta en Libia en 2011.
Un tribunal de Trípoli lo condenó a muerte en julio de 2015 por su papel en la represión de la revuelta de 2011, que derrocó a su padre Muamar Gadafi.
El gobierno de unidad nacional dijo, respecto al caso del hijo de Gadafi, que estaba “dispuesto a cooperar con las organizaciones internacionales, especialmente con la CPI (…) en el marco del respeto de las leyes y de las soberanía de Libia”.
