El derechista italiano Matteo Salvini, líder de la Liga, pidió elecciones parlamentarias anticipadas entre septiembre y octubre de este año con el fin de destituir al jefe de gobierno Giuseppe Conte, acusado de ser contrario a “la libertad de empresa” y de “falta de ideas aclaras”.

Los italianos están llamados a votar en los próximos meses y si bien la fecha aún no ha sido fijada, las elecciones se llevarán a cabo en 20 regiones para elegir presidente regional. En la misma ocasión deberán pronunciarse sobre el referéndum que pide la reducción del número de parlamentarios.

“Pidamos también a los votantes que se pronuncien por un gobierno que dure cinco años y tenga las ideas claras”, aseguró Salvini en una entrevista este lunes al diario La Stampa, del grupo Fiat.

“Este gobierno es ideológico, se opone a la libertad de empresa y de culto y quiere acabar con las escuelas y los hospitales privados”, aseguró el líder de la extrema derecha, quien ha aprovechado la emergencia sanitaria por el coronavirus para atacar al gobierno, lo que ha afectado negativamente su popularidad.

“Hemos tratado de cooperar con este gobierno. Los hemos inundado con propuestas y el resultado ha sido cero. Todo ha sido bloqueado desde el año pasado debido a las disputas dentro de la mayoría del gobierno”, sostiene Salvini.

El actual gobierno liderado por Giuseppe Conte, llamado Conte 2, una coalición entre la formación antisistema Movimiento 5 Estrellas y el Partido Democrático (PD, centro-izquierda), debería durar hasta 2023.

Salvini, que fue aliado por casi un año del precedente gobierno liderado por Conte 1, llamado Conte 1, quiso derrocarlo sin lograrlo, una estrategia que terminó por desgastarlo, favoreciendo a la otra líder soberanista Giorgia Meloni, de Hermanos de Italia, quien se está consolidando con su línea dura y directa, más derechista, con cerca el 14% en las encuestas.

La Liga, a la que le otorgaban el año pasado aproximadamente el 35-36% de las intenciones de voto, ha perdido diez puntos y ahora cuenta con 25-26%, aunque se mantiene como el primer partido de Italia, seguido por el PD, con alrededor del 20-21%.

Para tratar de recuperar a su electorado, Salvini emprendió de nuevo el viernes una campaña electoral con viajes a Campania (sur) para luego pasar a Marche y Abruzzo (centro).