El Reino Unido se compromete a no hacer “competencia desleal” a la Unión Europea, como se teme en Bruselas, después del Brexit, aseguró el primer ministro británico, Boris Johnson, al presentar su visión sobre la futura relación entre su país y los 27.

“No haremos ninguna competencia desleal, ni comercial, ni económica y medioambiental”, declaró el dirigente conservador, comprometiéndose a no revisar a la baja las normas europeas.

Al mismo tiempo, rechazó cualquier alineamiento a las reglas europeas como contrapartida “al librecambio”.

Es más, se cuestionó: “¿Vamos a insistir para que la Unión Europea haga todo como nosotros como precio del librecambio? Por supuesto que no”, dijo enfático.

Y agregó que “no veo la necesidad de obligarnos a un acuerdo con la UE. Restauraremos nuestra plena soberanía sobre nuestras fronteras, la inmigración, la competencia, las normas que rigen los subsidios, los suministros, la protección de datos “.

El primer ministro estimó que la cooperación con los europeos en defensa y política exterior no necesita “necesariamente un tratado”.

Por su parte, la Unión Europea advirtió contra cualquier competencia desleal y aseguró que estaba dispuesta a negociar “un acuerdo comercial muy ambicioso”.

Ese acuerdo apunta en particular a eliminar todos los derechos aduaneros y todas las cuotas sobre los bienes intercambiados con el continente, indicó el negociador europeo del Brexit, Micher Barnier.