El Kremlin prometió este martes que habrá un gran debate sobre las enmiendas a la Constitución que propuso el presidente ruso, Vladimir Putin, si bien defendió que las reformas deberían realizarse lo más rápidamente posible.

“Habrá un gran debate sobre las enmiendas propuestas”, declaró a la prensa el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, que mencionó una “gran campaña de información y discusiones”.

Para sorpresa general, Vladimir Putin anunció la semana pasada una revisión constitucional durante su discurso ante el Parlamento, y esto provocó la dimisión del primer ministro Dmitri Medvedev y de su gabinete.

El mandatario explicó su decisión por el “reclamo de cambio surgido claramente en la sociedad” rusa, y designó a Mijaíl Mishustin -un alto funcionario con buena reputación pero en gran parte desconocido- para dirigir el gobierno.

El lunes, Putin presentó ante la Duma (la cámara baja del Parlamento) sus enmiendas a la Constitución, que incluyen una serie de medidas para reforzar el papel del Parlamento en el nombramiento del primer ministro, por ejemplo, o para limitar los mandatos presidenciales a dos, en lugar de dos consecutivos.

“Todas las iniciativas del jefe del Estado son acogidas con gran atención y su puesta en marcha y su discusión siempre serán prioritarias”, declaró Peskov cuando los periodistas le pidieron que precisara la “rapidez” con la que se aplicarán esas medidas.

“No fijamos fechas precisas” para llevar a cabo la reforma, “pero es evidente que no vamos a alargarlo mucho”, añadió.

En principio, los diputados empezarán a examinar las propuestas el jueves, según un responsable de la cámara baja del Parlamento citado por la agencia de prensa Ria Novosti.

La reforma propuesta por Putin hizo que afloraran las conjeturas sobre su futuro político más allá de 2024 (cuando termine su mandato), pues, en principio, no podrá volver a presentarse.