Italia espera este martes el resultado de un voto por internet de varios miles de miembros del Movimiento 5 Estrellas (M5S, antisistema), decisivo para la formación de un nuevo gobierno de coalición con el Partido Democrático (PD, centro-izquierda).

La votación digital, que se desarrolla hasta este mediodía, tendría un resultado positivo, según el periódico La Repubblica. En caso negativo la formación de un nuevo ejecutivo quedaría en entredicho.

“El nuevo gobierno está en el zaguán. Detenerlo ahora parecería realmente complicado”, escribe el periódico.

Los responsables de M5S pidieron votar “sí” a sus miembros, inscritos en una plataforma informática llamada Rousseau, porque consideran que “el momento del país es muy delicado”.

“Para nosotros, el mandato de los ciudadanos es una cosa seria, dura cinco años, el tiempo previsto por la Constitución para realizar un programa de gobierno”, indica el blog del Movimiento.

Se trata de una manera de recordar que la legislatura empezó hace tan sólo 18 meses y que sería mejor no interrumpirla.

¿La base decide?

Durante toda la jornada del lunes, el M5S recordó, a través de su líder Luigi Di Maio, que el voto de los inscritos prima sobre cualquier otra consideración y que un “no” pondría fin a las negociaciones en curso con el PD.

Di Maio, criticado por su lentitud, incluso por el fundador del M5S, el cómico Beppe Grillo, avanzó finalmente el lunes hacia un nuevo gobierno al renunciar a que su partido obtenga un puesto de viceprimer ministro, a condición que el PD también renuncie.

“El futuro de un nuevo gobierno (…) está en manos de una consulta en una plataforma informática de una empresa privada, sin ningún control”, lamentó Mariastella Gelmini, la líder de los diputados de Forza Italia (FI), el partido de Silvio Berlusconi.

“Es un insulto a las instituciones, a la Constituación y sobre todo a la inteligencia de los italianos”, añadió.

Por su parte, el exmagistrado del Tribunal Constitucional, Sabino Cassese, asegura en el Corriere della Sera la paradoja que 50 o 60.000 personas puedan contradecir el voto de 11 millones de italianos que eligieron al M5S en las legislativas de marzo de 2018.

Dos expresidentes del Tribunal Constitucional, Cesare Mirabelli y Giovanni Maria Flick, también critican el escrutinio, contrario a la “democracia representativa”.

El líder de La Liga (extrema derecha), Matteo Salvini, rompió el 8 de agosto la alianza de gobierno que había formado 14 meses antes con el M5S.

Por su parte, el PD vio en esta crisis política una posibilidad de volver al poder y espera lograr formar un nuevo gobierno.

“Trabajamos con paciencia y seriedad para un gobierno que permita el cambio real que necesita Italia”, dijo el secretario general del PD, Nicola Zingaretti, asegurando tener “confianza y optimismo”.