Ucrania anunció el jueves haber retenido a un petrolero ruso en uno de sus puertos del mar Negro, por sospechas de estar vinculado con un incidente naval que enfrentó a los dos países a finales de 2018.

El petrolero participó, según Kiev, en la incautación por parte de Rusia de barcos militares ucranianos frente a las costas de Crimea en noviembre. Llegó el miércoles al puerto ucraniano de Izmail, en la región de Odesa, donde fue retenido, indicaron los servicios de seguridad ucranianos en un comunicado.

Por su parte, Moscú alertó a Kiev de las “consecuencias” que podría tener la captura.

“Estamos esclareciendo las circunstancias en las que ocurrió [la captura del navío] para tomar las medidas pertinentes”, indicó a la AFP un portavoz del Ministerio ruso de Relaciones Exteriores. “Si se trata de una toma de rehenes rusos, se considerará como una burda violación del Derecho internacional y las consecuencias no tardarán en llegar”, avisó.