El servicio meteorológico nacional de Francia revisó este viernes al alza su récord histórico de temperatura, registrado durante la ola de calor que se abatió sobre el país a fines de junio, y lo situó a 46 grados centígrados.
El mes pasado, gran parte de Europa sufrió las consecuencias de una intensa ola de calor, y las temperaturas, especialmente en Francia, batieron récords históricos.
El 28 de junio, en el punto álgido de esta canícula, Météo-France anunció un récord absoluto de 45,9 °C en Gallargues-le-Montueux, una localidad en el departamento del Gard, cerca de Montpellier (sur).
Pero este viernes la agencia meteorológica precisó que, tras un nuevo análisis de los datos, ese mismo día se había registrado un récord de 46,0 °C en la ciudad de Vérargues, en el departamento de Hérault, también en el sur.
Francia se prepara a enfrentar una nueva ola de calor la próxima semana, la segunda en menos de un mes, que se anuncia intensa pero menos larga que la precedente.
Se prevé que las temperaturas suban a partir de este fin de semana y alcancen a mitad de semana los 40 °C.
Según los científicos, las olas de calor serán cada vez más frecuentes y más intensas debido al calentamiento global.
