La Fiscalía de Cataluña pidió ocho años de prisión para una joven acusada de arrancarle la lengua a su expareja, tras pedirle un último beso, durante un encuentro que tuvieron a mediados de 2017.

El incidente se registró el 27 de junio de 2017 en Barcelona, cuando la joven identificada como Adaia L.E., habría arrancado la lengue de su pareja, quien durante esa tarde dio por terminada la relación entre ambos.

De acuerdo al portal español La Vanguardia, tras terminar la relación, la mujer le pidió un último beso a la víctima, pero cuando se besaron, ella le arrancó la lengua de un mordisco, la escupió al suelo y dejó que se desangrara.

La joven habría huído del lugar, pero un vecino del sector donde estaban escuchó los gritos del hombre y llamó a los servicios de emergencias. A las horas fue detenida la agresora, quien quedó en libertad y tras casi dos años, recién enfrentará esta semana el juicio oral.

Tras la difusión de la noticia en los medios de comunicación españoles, la joven entregó su versión de los hechos y señaló que el ataque fue en defensa propia.

“Si hace dos años no me hubiera defendido ahora estaría muerta”, declaró en entrevista con La Vanguardia, descartando que haya actuado en venganza, como plantea la Fiscalía.

De acuerdo a la versión dada por Adaia, tras una discusión intentó irse del lugar, pero el hombre la siguió, la acorraló y trató de darle un beso a la fuerza, por lo que se desesperó, cerró la boca y huyó.

“Tuvimos una discusión y yo quería irme de allí. Cogí mi móvil y el cargador y me fui a algún locutorio para cargarlo. Él me siguió por la calle. Como estaba todo cerrado corrí un poco y volví a casa. Allí me acorraló, me cogió, me agredió y me estuvo ahogando muy fuerte durante varios minutos. Me decía que no me podía ir, que me tenía que quedar con él”, cuenta sobre lo ocurrido.

“Me tenía cogida por el cuello y tapaba la boca y nariz. Unos segundos más y me muero. Luego me hizo una especie de gancho y me metió la lengua en la boca. No sé por qué lo hizo. Estaba tan nerviosa que lo que quería era irme de sus garras. Cerré la boca y salí corriendo”, relató Adaia a La Vanguardia.

Aunque la Fiscalía solicita 8 años de prisión para la mujer de 24 años, los abogados particulares del hombres han solicitado una pena de 10 años de cárcel argumentando como aravante la alevosía. Mientras ella lo denunció por provocarle lesiones menores, lo que tendrá un año de reclusión.