La principal organización patronal británica, la CBI, advirtió el viernes de que un Brexit sin acuerdo sería “imposible de gestionar” habida cuenta de las consecuencias que tendría en la economía y la actividad empresarial, a pocos días de una votación crucial en el parlamento.

“No nos engañemos, una ausencia de acuerdo sería imposible de gestionar”, afirmó la directora general de la Confederación de la Industria Británica (CBI), Carolyn Fairbairn, en un discurso pronunciado en Bristol, en el suroeste de Inglaterra.

“Ciertamente, no es deseable”,
insistió.

El parlamento británico debate actualmente el acuerdo de Brexit negociado por la primera ministra conservadora Theresa May con la Unión Europea.

A menos de tres meses de la fecha prevista para la salida británica del bloque, el 29 de marzo, los diputados parecen determinados a rechazar el texto en la votación prevista para el próximo martes.

El acuerdo negociado por May garantiza entre otras cosas un periodo de transición hasta finales de 2020, aunque ampliable dos años más, en que las empresas británicas seguirían sometidas a las mismas reglas que hasta ahora mientras llevan a cabo las adaptaciones necesarias.

Fairbairn ya ha advertido en anteriores ocasiones que, a falta de este periodo de transición, las empresas se verían empujadas “al precipicio” de un Brexit brutal: de la noche a la mañana el comercio entre Reino Unido y los 27 pasaría a regirse por las reglas básicas de la Organización Mundial del Comercio (OMC), que fija los aranceles a la circulación de mercancías.

Las consecuencias económicas de un Brexit sin acuerdo “serían profundas, extensas y duraderas”, subrayó el viernes Fairbairn, que aludió a un desplome del 8% del Producto Interior Bruto (PIB) y al impacto inevitable en la vida diaria de los británicos.

“Las empresas se enfrentarían a nuevos costes y aranceles. Nuestros puertos se verían colapsados, privando a las empresas de los productos que necesitan para abastecer a sus clientes. Perderíamos los acuerdos comerciales con países como Japón, Corea del Sur o Turquía” porque Reino Unido participa en ellos actualmente a través de la UE, detalló.

“La responsabilidad de garantizar una salida ordenada (de la UE) está ahora entre las manos del parlamento. Cada parlamentario es elegido democráticamente para preservar la seguridad y la prosperidad del país. Y la próxima semana tendremos una prueba”, agregó la responsable patronal.

El jueves, el ministro británico de Empresas, Greg Clark, ya había advertido de que un Brexit sin acuerdo, presentado por el ejecutivo de May como una posibilidad en caso de que el Parlamento rechace su acuerdo el martes, sería una “situación desastrosa” para el país.