El negociador europeo Michel Barnier confirmó este lunes que, pese a las “intensas” negociaciones, todavía no se logró un acuerdo sobre el Brexit, aumentando la presión sobre una debilitada primera ministra británica, Theresa May.

Barnier explicó en una reunión en Bruselas a los ministros de los 27 socios de Reino Unido que “continúan los intensos esfuerzos de negociación, pero que aún no se ha llegado a un acuerdo”, indicó el Consejo de la UE.

A menos de cinco meses del Brexit, previsto el próximo 29 de marzo, May intenta concluir rápidamente las negociaciones con Bruselas para que el parlamento británico pueda votar un acuerdo antes de finales de año.

“Las negociaciones continúan. Negociaron hasta las 02H45 de la madrugada y continúan esta mañana”, declaró a la prensa un portavoz de Downing Street, subrayando su objetivo de “lograr un acuerdo este otoño” boreal.

Las discusiones siguen embarradas en cómo evitar una frontera clásica entre Irlanda y la británica Irlanda del Norte, a la que se suman otros escollos como si permitir a los pescadores europeos seguir faenando en aguas británicas.

Los ministros de Asuntos Europeos expresaron su cautela sobre un acuerdo inminente, tras varios días de especulaciones al respecto, ya que “no hubo progresos suficientes”, según el austríaco Gernot Blümel, cuyo país ejerce la presidencia pro témpore de la UE.

“No hay señales positivas” sobre los planes sobre Irlanda, apuntó a su llegada a la reunión el canciller belga, Didier Reynders. “Espero que sea así en las próximas semanas”, agregó fijando la fecha límite en Navidad.

Para los analistas de Euroasia Group, si no se logra un avance antes del miércoles, “May debería esperar hasta la cumbre prevista el 13 y 14 de diciembre para obtener la aprobación de la UE a un acuerdo”.

Una fuente del gobierno británico apuntó al miércoles como la fecha límite para lograr un acuerdo, que ambas partes puedan sellar durante una cumbre extraordinaria en noviembre.

La incertidumbre sobre un eventual acuerdo rápido lastró este lunes la libra esterlina que hacia las 12H00 (11H00 GMT) registró una fuerte baja, a 1,2852 dólares contra los 1,2970 dólares el viernes por la noche.

“Etapa muy crítica”

El acuerdo de divorcio debe incluir un “backstop” o “red de seguridad” que asegure una circulación de bienes fluida a ambos lados de la frontera en la isla de Irlanda, a la espera de un acuerdo de libre comercio entre Londres y Bruselas que resuelva este escollo.

El negociador europeo, que no compareció en rueda de prensa, se reunió este lunes con el ministro de Exteriores irlandés, Simon Coveney, quien, antes de viajar a Bruselas, dijo que “las negociaciones se encuentran en una etapa muy crítica y delicada”.

“Queremos que se llegue a un acuerdo lo antes posible”, agregó Coveney, que insistió en la necesidad de hallar un “‘backstop’ jurídicamente operativo”.

Una de las opciones sería mantener a Reino Unido dentro de la unión aduanera de la UE mientras negocian un acuerdo comercial, lo que le obligaría a regirse por la reglamentación europea pero sin participar en la toma de decisiones.

Las soluciones evocadas irritan al ala euroescéptica del Partido Conservador de la primera ministra británica, así como al pequeño partido norirlandés DUP, de cuyos 10 diputados depende su mayoría en el parlamento.

El ex canciller británico Boris Johnson, una de las cabezas visibles de los partidarios del Brexit, atacó de nuevo May, acusándola en el Daily Telegraph de estar “al borde de la rendición total”.

El viernes, su hermano Jo Johnson, partidario de la permanencia de Reino Unido en la UE, anunció su dimisión como secretario de Estado de Transportes británico, al calificar el acuerdo que se está ultimando de “terrible error” y pidiendo un segundo referéndum

Desde Bruselas, el secretario de Estado británico para el Brexit, Martin Callanan, urgió a no precipitarse de cara a lograr el “buen acuerdo” que pueda validar el parlamento británico. El gobierno británico debe evocar el Brexit durante una reunión el martes.