Dinamarca fue condenada a indemnizar a 18 civiles torturados en Irak en 2004, durante una operación realizada con apoyo de un batallón danés, aunque su implicación directa en el hecho no haya podido probarse, anunció la Corte de Apelaciones de Copenhague este viernes.

Veintitrés civiles demandaron al Estado danés tras haber sido detenidos y sometidos a “torturas y tratos inhumanos” durante la operación “Green Desert” en Al Zubair, una veintena de kilómetros al sur de Basora.

La Corte de Apelaciones decidió que “los soldados del batallón danés enviado a Irak en 2004 y que participaron en la operación no pueden ser considerados culpables de violencia contra iraquíes”.

Esa violencia fue perpetrada por las fuerzas iraquíes. Los soldados daneses podían haber previsto el “riesgo real” de malos tratos, y por eso el Ministerio de Defensa danés es responsable.

Pero no quedó probado que los soldados daneses pudieran prever “ni las torturas ni la violencia sistemática”.

18 de los 23 demandantes recibirán 30.000 coronas danesas, 4.600 dólares, de indemnización e intereses cada uno.

El ministro de Defensa, Claus Hjort Frederiksen, dijo estar “satisfecho” con la decisión, que disculpa a los militares daneses, pero advirtió que apelará porque la decisión del tribunal de segunda instancia fija una jurisprudencia que “pone a Dinamarca en una situación difícil”.

“Eso significa que no podremos seguir contribuyendo a mejorar la seguridad -y por tanto a garantizar los Derechos Humanos- en los países sumidos en un conflicto armado”, dijo en un comunicado.