La comisaria europea de Comercio, Cecilia Malmström, aseguró este viernes que el “diálogo” sigue siendo su “primera opción” para evitar los pesados aranceles para importaciones siderúrgicas adoptados por Washington, reiterando que no son una “amenaza para [su] seguridad nacional”.

“El diálogo es siempre la primera opción de la UE”, dijo Malmström, durante un acto del centro de reflexión estadounidense German Marshall Fund en Bruselas, para quien aumentar los aranceles “no es la forma correcta” de abordar la “preocupación sobre la sobrecapacidad en el sector del acero”.

La UE se suma a las fuertes críticas de los socios comerciales de Estados Unidos, como China y Japón, después que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, impusiera la víspera derechos de aduana del 25% para las importaciones de acero y del 10% a las de aluminio por motivos de “seguridad nacional”.

Antes de su entrada en vigor en dos semanas, el gobierno estadounidense está abierto a conversar “país por país” para negociar eventuales exenciones, como las acordadas a Canadá y México a la espera del resultado de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

“Somos amigos, somos aliados, trabajamos juntos, no podemos ser una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos, por lo que contamos que nos excluyan” de las medidas, agregó Malmström, quien se reunirá el sábado con el representante estadounidense de Comercio, Robert Lighthizer, en Bruselas.

La comisaria europea de Comercio aseguró que la decisión de Trump “no era muy clara” y, en este sentido, espera “obtener más claridad” al respecto. “Esperamos obtener la confirmación que la UE está exenta de todo esto”, subrayó.

A la espera de la confirmación final de los aranceles, la UE ya preparó medidas de represalias contra productos estadounidenses emblemáticos, según Bruselas en virtud de las reglas de la Organización Mundial del Comercio (OMC), para tratar de recuperar unos 2.800 millones de euros del perjuicio causado.

Entre los productos, “hay jugo de naranja, whisky, mantequilla de maní, todo lo necesario para el desayuno”, agregó la representante sueca de la Comisión Europea, que en la UE asume las competencias de comercio internacional.

La estrategia del ejecutivo comunitario también pasa por adoptar medidas de salvaguardia, para proteger la industria europea de un eventual desvío de las exportaciones de terceros países señalados por Washington, y una demanda ante la Organización Mundial del Comercio (OMC).