La primera ministra británica, Theresa May, declaró en su mensaje de Año Nuevo que 2018 será un año de “confianza y orgullo renovados” para el Reino Unido, que seguirá afrontando los desafíos de las negociaciones sobre el Brexit.

Las conversaciones sobre el divorcio entre Reino Unido y la Unión Europea, que será efectivo en marzo de 2019, entrarán en una nueva etapa el próximo año.

May aseguró que 2017 había sido un año de avances para Reino Unido, que alcanzó un acuerdo sobre el coste de su separación de la UE, sobre Irlanda del Norte y los derechos de los ciudadanos de la UE, tras la primera fase de las negociaciones sobre el Brexit.

“Creo que 2018 puede ser un año de confianza y de orgullo renovados para nuestro país”, declaró la primera ministra. “Un año en el que seguiremos logrando progresos hacia un acuerdo del Brexit exitoso, hacia una economía preparada para el futuro y una sociedad más fuerte y más justa para todos”, añadió.

“Convertir el Brexit en un éxito es crucial, pero no será el límite de nuestras ambiciones”, añadió.

La primera ministra también indicó su intención de reducir la deuda británica, sin dejar de invertir en educación, en hospitales y salud pública.

Respecto al ámbito laboral, May llamó a acabar con el acoso en el trabajo y a “eliminar todos los prejuicios y la discriminación” de la sociedad británica.

En el plano internacional, declaró que Reino Unido seguirá activo en la lucha contra el extremismo, el cambio climático y los residuos plásticos en los mares.