El papa Francisco pidió este domingo respetar los derechos de la minoría musulmana rohinyá tras la violencia de estos últimos días, mientras que planea, según la prensa, un viaje a Birmania y Bangladés a finales de noviembre.

“Llegaron tristes noticias sobre la persecución de la minoría religiosa de nuestros hermanos rohinyás”, declaró el Papa delante de miles de fieles reunidos en la plaza de San Pedro para el Ángelus del domingo.

“Me gustaría mostrar toda mi cercanía con ellos. Y todos pedimos al Señor que los salve y que despierte en los hombres y en las mujeres la buena voluntad para ayudarles, que todos sus derechos sean respetados”, añadió.

Desde el viernes, los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los rebeldes rohinyás dejaron al menos 100 muertos.

El sábado, las fuerzas de seguridad birmanas abrieron fuego contra los civiles que huían aterrados hacia el vecino Bangladés, que por su parte detuvo y obligó a 70 migrantes rohinyás a volver a Birmania.

Según varios medios especializados, una delegación del Vaticano estuvo recientemente en Birmania y en Bangladés para preparar una visita del Papa, planeada para finales de noviembre. El Vaticano no confirmó por el momento esta información.