A cinco meses de las elecciones presidenciales en Francia, la derecha celebra este domingo la primera vuelta de sus primarias en un clima de suspense, con unas encuestas que vaticinan un resultado reñido entre un expresidente y dos exprimeros ministros.

Las 10.228 mesas de votación abiertas en Francia metropolitana cerrarán a las 19:00 horas locales. Los territorios de ultramar comenzaron a votar el sábado. Los dos primeros pasarán a la segunda y definitiva vuelta, el 27 de noviembre.

Dada la mala posición en la que se encuentra la izquierda socialista en el poder en Francia, el vencedor de estas primarias tiene grandes posibilidades -según los sondeos- de ganar las elecciones presidenciales de mayo de 2017, en las que también se sitúa en posición de fuerza la candidata de extrema derecha Marine Le Pen.

Las encuestas de cara a estas primarias inéditas en la historia de la derecha francesa anticipan un final ajustado.

Tras varios meses encabezando las encuestas, el exprimer ministro Alain Juppé, de 71 años, ha perdido terreno y se encuentra ahora codo a codo con el expresidente Nicolas Sarkozy, de 61 años.

Detrás del dúo favorito, el ex primer ministro de Sarkozy, François Fillon, de 62 años, ha irrumpido con fuerza en las últimas semanas y podría dar la sorpresa el domingo accediendo a la segunda vuelta del 27 de noviembre.

La última encuesta de opinión, publicada el viernes por la noche al cierre de la campaña, le otorga incluso el primer puesto en la primera vuelta de las primarias con 30% de intenciones de voto, frente a 29% para sus dos principales rivales.

Los otros cuatro candidatos -Bruno Le Maire, Nathalie Kosciusko-Morizet, Jean-François Copé y Jean-Fréderic Poisson- están muy por detrás de los tres candidatos con más opciones para representar a la derecha en las presidenciales del próximo año.

Programas similares

Los tres grandes favoritos de estas primarias comparten un programa similar. En el plano económico todos proponen reducir el gasto público, terminar con la jornada laboral de 35 horas y retrasar la edad de la jubilación.

También comparten su voluntad de reforzar las fronteras europeas y limitar la inmigración.

Lo que más los diferencia es su estilo.

Juppé ha mantenido un discurso moderado, negándose a “ceder al miedo” o a “levantar a las élites contra el pueblo” en momentos en que la crisis migratoria y los atentados yihadistas alimentan los discursos populistas.

Sarkozy ha adoptado en cambio una línea más dura, acercándose a las tesis de la extrema derecha. El expresidente se ha posicionado además como el candidato del pueblo contra “las élites desconectadas de la realidad”.

El discreto Fillon, ex primer ministro de Sarkozy durante cinco años y muy popular entre los empresarios por su proyecto liberal sin complejos, es el más conservador de los tres candidatos sobre los temas sociales.

Vigilancia máxima

El resultado de la primera vuelta de estas primarias dependerá en gran parte de la participación. Si sólo vota el ‘núcleo duro’ de la derecha, la ventaja será para Sarkozy, pero una mayor participación podría beneficiar a un candidato más moderado.

A media jornada, habían votado 1,13 millones de personas, según los organizadores, que esperan superar los “tres millones de votantes”, más que en la primera vuelta de la primaria socialista de 2011 (2,66 millones).

Además, periodistas de la AFP observaron colas de espera frente a varios colegios electorales.

Todos los franceses con derecho a voto pueden acudir a las urnas. Para ello tienen que pagar dos euros por cada vuelta y firmar una declaración en la que aseguran respetar “los valores republicanos de la derecha y del centro”.

Resignados ante la anunciada derrota de su campo en la primera vuelta de las presidenciales de abril, algunos simpatizantes de la izquierda están decididos a acudir a las urnas este domingo para influir en el resultado.

En el barrio XX de París, donde los habitantes votan en su mayoría a la izquierda, también se observaba una afluencia notoria.

En momentos en que Francia está en estado de emergencia desde los atentados yihadistas del 13 de noviembre de 2015, el gobierno ha tomado “todas las medidas necesarias para el buen desarrollo” de los comicios, comenzando con la presencia de patrullas cerca de los centros de voto.

Los primeros resultados significativos podrían divulgarse hacia las 22:30 horas locales de este domingo.