El diputado holandés demócrata cristiano Frans van der Heijden se suicidó esta semana en compañía de su esposa Gonnie, a quien le aplicaron la eutanasia.
La mujer sufría una grave enfermedad en estado terminal por lo que fue autorizada por su médicos para poner fin a su vida, mientras que su esposo -también aquejado de un grave padecimiento- no había recibido autorización para que le aplicaran la eutanasia, por lo que se suicidó junto a ella el pasado 21 de octubre.
El hecho ha levantado la polémica en torno a la eutanasia y al derecho a ‘una muerte digna’ en Europa, especialmente cuando en Holanda se discute un proyecto de ley de muerte asistida para personas que no sufran de alguna enfermedad crónica y/o terminal.
En Holanda rige una ley de eutanasia desde 2002 que permite esta práctica en caso de enfermedades terminales o crónicas en un estado muy avanzado, características que no cumplía el diputado holandés, pese a también sufrir un padecimiento grave.
La pareja murió acostada en una cama rodeada de su familia y dejaron una carta donde critican las limitaciones actuales en torno a la eutanasia.
“Las personas que no están enfermas pero descubren que su vida ya no tiene sentido, deberían tener permitido morir (…)Es mucho más obvio que las personas cuyas vidas amenazan con convertirse en un gran sufrimiento, puedan poner fin a esa vida ahora que no es una carga ni para ellos ni para otros” señala la misiva, según recoge diario El Mundo de España.
“Después de una vida feliz juntos no queríamos separar lo que unimos en 1963”, agrega otra parte del mensaje, reporta le portal El Público de España.
En la carta también solicitan mayor libertad para que las personas puedan decidir terminar su vida de “forma digna.”Uno debe ser capaz de decidir por sí mismo cuando quiera acabar con su vida”, afirman.
También critican a las personas que estando a favor de la eutanasia siguen permitiendo que la legislación esté dominada por doctrinas religiosas.
“La mayoría cada vez más amplía de personas menos religiosas” que posibilitan que “la ley siga siendo regulada por minorías”, critican en su despedida.
Van der Heijden de 78 años trabajó como parlamentario desde 1970, con algunas pausas entre medio, antes ejerció como periodista y estaba casado desde 1962 con Gonnie de 76.
El Colegio Médico de Holanda está a favor por una ley de eutanasia, pero que sea usada como un último recurso, pero que no sea considerada un derecho, como proponen algunos sectores de la sociedad neerlandesa.
