Dos marroquíes radicalizados y expulsados de Francia la semana pasada hacia Marruecos se disponían a atacar lugares públicos, como restaurantes y discotecas, en la ciudad francesa de Metz (este), aseguró este sábado un diario marroquí.

Los dos hombres, partidarios del grupo Estado Islámico (EI), fueron extraditados el 26 de agosto de Francia a Marruecos. Según las autoridades marroquíes querían cometer “atentados de envergadura” en ambos países en nombre del EI.

“Las investigaciones de los servicios de seguridad marroquíes revelaron que querían atacar la plaza de la República, en el corazón de Metz” afirmó el sábado el diario privado arabofono Assabah, que dio detalles de su proyecto pero sin revelar la fuente de sus informaciones.

Los dos sospechosos querían utilizar armas de fuego según el modelo de los atentados de París (130 muertos en noviembre de 2015), así como vehículos dirigidos contra la multitud, como sucedió en Niza a mediados de julio (86 muertos) para causar “el mayor número de víctimas” explicó el diario.

Los dos hombres identificados por el diario como Redouane Dahbi y Ayyoub Sadki, querían pasar al acto “en la última semana de vacaciones del verano” y fueron expulsados “a petición de las autoridades marroquíes”.

En su momento las autoridades francesas explicaron que ambos fueron expulsados porque constituían una “amenaza grave” para “el orden público”.

El EI había prometido proporcionarles los medios necesarios para cometer sus atentados, explicó Assabah.

Marruecos se ha librado relativamente en los últimos años de la oleada de atentados yihadistas. El reino fue golpeado en 2003, cuando un atentado causó 45 muertos en Casablanca, y en 2011, con la muerte de 17 personas en Marrakesh.