El presidente Donald Trump afirmó este lunes que le resulta cada vez “más difícil” querer negociar un acuerdo con Irán, tras el arresto de presuntos espías de Estados Unidos por Teherán, en un momento de crecientes desencuentros entre ambos países.

Las autoridades de la República Islámica anunciaron la detención de 17 iraníes y la condena a muerte de varios de ellos en el marco del desmantelamiento de una “red de espías” de la CIA, una afirmación “totalmente falsa”, según Trump.

“Resulta cada vez más difícil para mí querer lograr un acuerdo con Irán porque actúan muy mal”, declaró Trump ante la prensa al recibir al primer ministro paquistaní, Imran Khan, en la Casa Blanca.

El multimillonario republicano, que retiró a su país del acuerdo internacional de 2015 para evitar el desarrollo de una bomba atómica por Irán, que consideraba demasiado laxo, no ha dejado de endurecer las sanciones contra el régimen de Teherán.

Pero, aunque las tensiones han aumentado en las últimas semanas, Trump ha afirmado que no quería una nueva guerra en Oriente Medio y ha hecho llamados a favor de un diálogo con los dirigentes iraníes, a pesar de la línea dura defendida por algunos “halcones” de su administración.

Teherán ha rechazado hasta el momento cualquier propuesta para negociar un nuevo acuerdo, alegando que no quería conversaciones bajo presión.

Las relaciones entre ambos países no parecen encaminarse a una mejoría. Este lunes, Washington sancionó a la compañía pública china Zhuhai Zhenrong y su director ejecutivo, Yumin Li, acusados por el jefe de la diplomacia Mike Pompeo de haber “violado la ley estadounidense al aceptar crudo” por parte de Teherán.

Desde el pasado mes de noviembre, todos los países pueden ser sanciones por Estados Unidos si compran petróleo iraní.