La foto del presidente estadounidense Donald Trump y su par francés Emmanuel Macron plantando un roble en el jardín de la Casa Blanca el año pasado simbolizaba la amistad entre los dos líderes.

Pero la relación entre ambos desde entonces se ha desgastado, por asuntos que abarcan desde Irán al comercio, y el árbol no sobrevivió, dijo una fuente diplomática.

Macron ofreció el joven roble a Trump en ocasión de su visita de Estado a Washington en 2018, y los dos lo plantaron ante la mirada de sus esposas y las cámaras de todo el mundo.

Era un gesto simbólico: el árbol provenía de un bosque del norte de Francia donde 2.000 soldados estadounidenses murieron durante la Primera Guerra Mundial.

Pero pocos días después no había señales del árbol, que había sido colocado en cuarentena. “Es una cuarentena que es obligatoria para cualquier organismo vivo importado a Estados Unidos”, dijo entonces en Twitter Gerard Araud, el embajador francés en Estados Unidos, añadiendo que la planta sería resembrada en una fecha posterior.

Pero nunca fue resembrada: el árbol murió durante la cuarentena, dijo la fuente diplomática.

La relación entre Macron y Trump gozaba de muy buena salud, cuando el mandatario francés lo visitó en la Casa Blanca en abril de 2018, pero desde entonces las relaciones comenzaron a deteriores, con un duro intercambio de críticas a fines del año pasado.

Macron llegó a ser el gran aliado de Trump en la Unión Europea, pero tras la diferencias en políticas económicas, diplomáticas y medioambientales, se han distanciado.