China afirmó este martes que nunca aceptará un chantaje, después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, acusara tanto a Pekín como a Moscú de continuar desarrollando misiles nucleares de alcance medio.

No obstante, China no es signataria del Tratado INF soviético-estadounidense de 1987 sobre la limitación de este tipo de armas.

Trump señaló el lunes que Estados Unidos desarrollará nuevamente estas armas, a menos que Rusia y China acepten dejar de hacerlos.

“En tanto la gente no entienda razones, nosotros las desarrollaremos”, declaró ante periodistas en la Casa Blanca. “Es una amenaza para quien quieras, y esto incluye a China, y esto incluye a Rusia, y esto incluye a cualquiera que quiera jugar a este juego”, añadió.

“Ahora que Estados Unidos quiere retirarse unilateralmente del tratado (INF) comienza a hablar de manera inapropiada de otros países”, señaló este martes ante la prensa la portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores chino, Hua Chunying, durante su encuentro regular con la prensa. “Este enfoque con el objetivo de culpar a otros es absolutamente injustificable e irracional”, agregó.

“Nunca aceptaremos la menor forma de chantaje”, advirtió.

El Tratado INF, firmado en 1987 por los presidentes Ronald Reagan y Mijaíl Gorbachov, condujo a la eliminación de casi 2.700 misiles nucleares de corto y mediano alcance.

El INF puso fin a una carrera armamentista provocada por el despliegue en la década de 1980 de misiles soviéticos SS-20 y estadounidenses Pershing, de mediano alcance que amenazaban a Europa oriental y occidental.

Trump no precisó si se podría negociar un nuevo tratado, pero el lunes indicó que Estados Unidos desarrollará estas armas salvo que Rusia y China acepten dejar de hacerlo por su parte.