El mandatario estadounidense, Donald Trump, exigió este domingo, en un tuit, la apertura de una investigación sobre una posible “infiltración” de su campaña presidencial por agentes del FBI con fines políticos.

“Exijo aquí, y mañana lo haré oficialmente, que el Departamento de Justicia investigue si el FBI infiltró o vigiló la campaña Trump con fines políticos”, tuiteó el mandatario.

El presidente estadounidense dijo además que se debe saber si “esas peticiones o solicitudes fueron hechas por personas de la administración Obama”.

El comunicado de Trump llega cuando aumenta la presión de la investigación sobre la supuesta injerencia de Rusia, y los medios estadounidenses informaron que el FBI envió un profesor estadounidense radicado en Gran Bretaña para hablar por separado con los asesores de campaña de Trump en 2016.

The New York Times describió al profesor como “un informante”, asegurando que la agencia federal buscaba pruebas de que Carter Page y George Papadopoulos, exasesores de Trump en al campaña electoral, tenían contactos sospechosos con Rusia.

Trump acusó al profesor de ser realmente un topo, posiblemente enviado por la administración Obama para infiltrarse en su campaña.

El Departamento de Justicia ordenó a su órgano de vigilancia interno que investigara las cuestiones planteadas por el presidente, lo que coincidió con una “revisión” que ya estaba en marcha sobre la aplicación de la ley FISA, que según los republicanos no se respetó en relación a la vigilancia de Page.

“El departamento solicitó al inspector general que ampliase la revisión en curso del proceso de aplicación de la FISA, para determinar si hubo alguna irregularidad o motivación política en la forma en que el FBI realizó su investigación de contrainteligencia de las personas sospechosas de estar involucradas con los agentes rusos que interfirieron en las elecciones presidenciales de 2016 “, dijo la portavoz del Departamento de Justicia, Sarah Isgur Flores, en un comunicado.

Legisladores demócratas acusan a la Casa Blanca y a los republicanos de querer realmente desestabilizar al fiscal especial Robert Mueller, que ya lleva un año investigando la posible colusión entre Moscú y el equipo de campaña de Trump para ganar los comicios de 2016 a Hillary Clinton.

El mandatario ha denunciado con vehemencia la “cacería de brujas” que según él representa la investigación Mueller sobre la supuesta colusión.