El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, finalmente cumplió lo que había amenazado desde la campaña electoral de 2016 y retirará a su país del acuerdo nuclear firmado con Irán en 2015.

“Estoy anunciando hoy (martes) que Estados Unidos se retirará del acuerdo nuclear con Irán. En momentos, firmaré el memorando presidencial que restablece sanciones” a Irán, dijo el mandatario en un mensaje al país.

Trump denunció que Irán no ha cumplido el acuerdo y ha seguido con una actitud bélica en medio oriente, siendo un agente desestabilizador.

“El régimen de Irán ha intentado conseguir armas nucleares. Este ha sido un acuerdo unilateral que nunca se debió haber hecho. No trajo la paz, no trajo la calma y nunca la traerá”, expresó Trump.

Pese a su tono agresivo, el gobernante norteamericano se mostró abierto a buscar un nuevo acuerdo con Teherán y dijo estar dispuesto para sentarse a negociar para un tratado duradero.

La decisión de Trump de abandonar el acuerdo conlleva la reactivación de las fuertes sanciones sobre Irán por su programa nuclear, que contemplaban -entre otras medidas- fuertes restricciones a sus exportaciones, incluido el petróleo.

El presidente estadounidense dijo que mantuvo consultas con “aliados y asociados alrededor del mundo” entre los que mencionó a Francia, Alemania y el Reino Unido.

“Estamos unidos en nuestro entendimiento y convicción de que Irán no debe nunca adquirir un arma nuclear. Y de estas consultas resulta claro para mí que no podemos prevenir una bomba nuclear iraní bajo la estructura podrida de este acuerdo”, dijo.

En la visión de Trump, el acuerdo nuclear firmado con Irán “es defectuoso en su origen. Si no hacemos nada, sabemos exactamente qué ocurrirá”.

Las principales potencias europeas: Italia, Reino Unido y Alemania, emitieron un comunicado conjunto en donde lamentaron la decisión de Washington de abandonar el acuerdo nuclear.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, expresó que la decisión tomada por Trump era valiente y apoyó a Estados Unidos en sus críticas a Irán y su programa nuclear.

El expresidente de Estados Unidos y quien lideró la firma del acuerdo, Barack Obama, calificó como un “gran error” la decisión de su sucesor, lamentando la salida de su país del tratado.