Este jueves absolvieron a un indocumentado mexicano acusado de asesinato, cuyo caso era usado por el presidente Donald Trump para justificar la construcción del muro en la frontera.

José Inés García Zárate, que al momento del crimen ya había sido deportado cinco veces y tenía antecedentes, fue hallado inocente del asesinato de Kathryn Steinle en julio de 2015, informaron medios locales.

Su arresto fue usado por Trump como un ejemplo de la violencia causada por inmigrantes ilegales y para atacar a las llamadas “ciudades santuarios”, que no cooperan con entidades ni agentes del orden federal en materia migratoria.

Trump dijo en una entrevista con CNN en 2015 que García era un “animal que le disparó a una maravillosa, hermosa mujer”. “Este tipo ya había sido expulsado de vuelta a México, pero México nos envía de nuevo por la frontera gente que son criminales, narcotraficantes”.

El caso impulsó que la Cámara de Representantes aprobara un proyecto de ley que reformaba la legislación migratoria para imponer restricciones en el acceso a fondos federales para “ciudades santuario” y otro que endureció las sanciones de privación de libertad a inmigrantes que ingresaron ilegalmente al país después de haber sido deportados o rechazados previamente.

Ese segundo se llamó precisamente “La Ley de Kate”, en homenaje a Steinle. Ninguno de los proyectos pasó en el Senado.

Las “ciudades santuario” no procesan el arresto de inmigrantes en situación irregular para entregarlos a autoridades como el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés).

El fiscal general Jeff Sessions dijo en un comunicado que “la decisión de San Francisco de proteger indocumentados criminales llevó a la prevenible y lamentable muerte de Kate Steinle”.