Con el transcurso de las horas, se han ido conociendo más detalles sobre Devin Kelley de 26 años, autor de un tiroteo en una iglesia bautista en Texas, que dejó 26 muertos la jornada del domingo.

El hombre entró vestido de negro a une iglesia de la comunidad Sutherland Springs y armado con su arma semiautomática Ruger AR, abrió fuego contra las personas que asistían a la misa dominical, causando víctimas de entre 5 a 72 años.

Luego continuó con su masacre en el interior de la iglesia, en pleno servicio religioso, antes de ser atacado por un habitante que le quitó el fusil. El tirador logró huir pero fue encontrado muerto dentro de su vehículo poco después, sin que se sepa si se suicidó o si alguien disparó contra él.

Entre los datos que se han conocido sobre Kelley, destacan que integró las Fuerzas Armadas de Estados Unidos, entre 2009 a 2013, pero fue dado de baja tras un juicio marcial y condenado a 12 meses de reclusión por maltratos a su esposa e hijo, consigna diario El País de España.

Tras su salida de las Fuerzas Armadas, Kelley nunca pudo encontrar un trabajo fijo, pero estuvo haciendo clases a niños de 4 a 6 años en diversos centros religiosos, según su perfil de Linkedin.

Pese a que fue expulsado del ejército, mantenía una estrecha relación con las armas y hace algunas semanas había publicado en su cuenta de Facebook con orgullo sobre la adquisición de un rifle semiautomático.

“Ella es una mala puta”, escribió respecto a la Ruger AR que había adquirido, un arma que en Estados Unidos se puede obtener fácilmente por menos de 500 dólares (350 mil pesos chilenos aproximadamente).

Hasta el momento se desconocen los vínculos de Kelley con la iglesia que atacó y los motivos que le llevaron a ejecutar esta matanza, que ocurre a poco más de un mes del tiroteo en Las Vegas que dejó más de 55 muertos y reabrió el debate sobre porte y uso de armas en Estados Unidos.