Este miércoles, cinco legisladores demócratas estadounidenses pidieron la renuncia de los ministros de Salud y Medio Ambiente de Donald Trump, ambos criticados por haber recurrido a aviones privados para realizar desplazamientos oficiales en lugar de viajar en líneas regulares.

El pedido de dimisión atañe a Tom Price de Salud por haber hecho un viaje ida y vuelta entre Washington y Filadelfia en un avión privado que costó 25.000 dólares, cuando existen numerosos vuelos diarios entre esas dos ciudades de la costa este de Estados Unidos.

Price hizo al menos 26 viajes en naves privadas en lo que va del año con un costo total de 400.000 dólares, según el sitio web Politico.

Los viajes eran oficiales, destacó el departamento, pero incluían lugares en los que Price tiene propiedades o amigos.

The Washington Post reveló esta semana que también Scott Pruitt, director de la Agencia de Protección Ambiental (EPA), había usado un avión privado en tres ocasiones, y un avión militar en junio para desplazarse entre Ohio y Nueva York, por un total de 58.000 dólares.

Las normas gubernamental estadounidenses obligan a los altos funcionarios a viajar en líneas regulares cuando existen para el lugar y la fecha requeridas.

Aunque defendió la legalidad de sus viajes, Price anunció el domingo que no utilizaría más aviones privados hasta que se concluya una investigación interna de su ministerio.

Pero el presidente estadounidense no está aparentemente satisfecho con ese uso de los dineros públicos.

Consultado acerca de si los responsables serían despedidos, el miércoles respondió: “se verá”. “Lo estoy considerando. No estoy contento y lo hice saber”, agregó.