El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, nombró este viernes al secretario de Seguridad Interna, John Kelly, como nuevo jefe de gabinete.

“Tengo el placer de informar que he nombrado al general y secretario John Kelly como jefe del gabinete de la Casa Blanca. Es un gran estadounidense”, anunció Trump.

Lo curioso que es la noticia la entregó a través de Twitter y sin informar previamente a quien ostentaba ese cargo, Reince Priebus, quien lo acompañó desde su primer día en la Casa Blanca.

De hecho, recién 10 minutos más tarde, a través de la misma red, dio cuenta explícita de su despido.

Priebus se desempeñó durante varios años como presidente del Comité Nacional del partido Republicano, y había sido una pieza fundamental en la formación del gobierno después de las elecciones, en el comité de transición.

Sin embargo, la llegada de Anthony Scaramucci a la Casa Blanca como nuevo jefe de Comunicaciones selló la suerte de Priebus.

De acuerdo con Scaramucci, Priebus bloqueó durante cinco meses su llegada a la Casa Blanca.

Además, Scaramucci llegó a la conclusión de que Priebus era el principal responsable por la incontenible secuencia de filtraciones a la prensa de datos internos de la Casa Blanca, incluyendo informaciones comprometedoras.

Esta semana Scaramucci realizó una explosiva llamada telefónica a un periodista para presionarlo a que dijera quién le abastecía de informaciones desde la Casa Blanca, y el contenido de la conversación se tornó público.

En esa conversación, Scaramucci definió a Priebus como un “esquizofrénico paranoide” y adelantó que sus horas como jefe de Gabinete estaban contadas ya que lo habían identificado como el principal responsable por las filtraciones a la prensa.

De este modo terminan los tensos episodios entre Scaramucci y Priebus, los que habían tornado literalmente explosivo el clima en la Casa Blanca en los últimos días.