El ataque de Estados Unidos contra una base militar del régimen sirio provocó “muertes”, según anunció el gobernador de la provincia siria de Homs, donde se encuentra el aeródromo: “Ese aeropuerto constituye un apoyo importante a las Fuerzas Armadas en la batalla contra el Estado Islámico”, explicó.

“Hay mártires, pero no tenemos aún un balance ni de fallecidos ni de heridos”, afirmó el mandatario Talal Barazi.

“Hay heridos que recibieron quemaduras (…) hay incendios que intentamos controlar (…) tomará un poco de tiempo evaluar los daños”, agregó. “Condenamos toda acción que apunte a las bases militares sirias”, añadió.

“La Fuerza Aérea presente en el aeropuerto Shayrat constituye un apoyo importante a las fuerzas armadas en la batalla contra el grupo Estado Islámico en la región de Palmira”, añadió el gobernador.

Palmira, situada en la provincia de Homs, está controlada por los yihadistas y, tanto el régimen sirio como la coalición internacional liderada por Estados Unidos, combaten al grupo terrorista.

Según indicó Rami Abdel Rahman, director del OSDH, “tenemos la confirmación de la muerte de cuatro militares, entre ellos un general de brigada de la Fuerza Aérea. El aeropuerto fue casi totalmente destruido: la zona de estacionamiento de aviones, el depósito de combustible y el edificio de defensa aérea fueron pulverizados”.