El líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, afirma que ha ganado la batalla contra el Covid-19, que apareció en suelo norcoreano hace apenas tres meses, según los medios estatales.
Pyongyang asegura que no se han registrado nuevos ‘casos de fiebre’ desde el 29 de julio, tras alcanzar un máximo de casi 393.000 el 15 de mayo. El propio dictador norcoreano padeció la enfermedad, según su hermana.
Presidiendo un encuentro con trabajadores sanitarios y científicos, Kim Jong-un anunció este jueves la “victoria (…) en la guerra contra la maligna enfermedad pandémica”, según la agencia de prensa estatal KCNA.
El Covid-19 está causando estragos entre los “hermanos enemigos”.
Mientras el líder norcoreano Kim Jong-un acaba de anunciar la victoria de la campaña antiepidémica en una reunión nacional, su hermana menor y vicedirectora del Comité Central del Partido de los Trabajadores, Kim Yo-jong, acusa a Corea del Sur de lanzar al Norte panfletos infectados con el coronavirus en globos. Se trata de una referencia a los folletos enviados por grupos de desertores norcoreanos radicados en el Sur.
Según un artículo publicado esta mañana por la Agencia Central de Noticias de Corea del Norte (KCNA), se la cita diciendo que el Norte está dispuesto a responder “no sólo exterminando el virus, sino también erradicando a las autoridades surcoreanas”.
Una acusación que forma parte de la guerra de palabras que revive constantemente el reino ermitaño para reforzar la unidad interna y, en este caso, para eximirse de cualquier responsabilidad en la crisis de Covid-19.
Consciente de que el Norte podría utilizar sus reiteradas acusaciones como pretexto para nuevas provocaciones militares, Seúl denunció las “afirmaciones infundadas” y dijo estar firmemente preparado para “todas las posibilidades”.
El dictador norcoreano tuvo covid-19
En otra información de esta agencia, la poderosa hermana del líder reveló que el mismo mandatario enfermó durante el brote.
Kim “sufrió fiebre alta durante los días de esta guerra de cuarentena, pero no podía quedarse tumbado ni por un momento porque pensaba en la gente de la que era responsable”, dijo la hermana.
Es la primera vez que un alto responsable norcoreano revela que su líder, cuya salud siempre está bajo atento escrutinio de los analistas, fue contagiado del virus.
El régimen comunista dispone de uno de los peores sistemas sanitarios del mundo, con hospitales pobremente equipados, escasas unidades de cuidados intensivos y sin tratamiento o vacunas anticovid, aseguran los expertos.
En contraste, Corea del Sur, con un sistema de salud mucho más avanzado y un amplio porcentaje de la población vacunado, presenta una ratio de letalidad del 0,12%, según datos oficiales.
