La policía de Bangladés anunció el miércoles la inculpación de 16 personas por el asesinato de una mujer de 19 años que murió quemada viva tras haber denunciado por acoso sexual al director de la escuela coránica donde iba.

La muerte de Nusrat Jahan Rafi el mes pasado desató una ola de protestas en todo el sur de Asia. La primera ministra de Bangladés, un país de 160 millones de habitantes, prometió perseguir a todas las personas implicadas en el caso.

Según las autoridades, la víctima fue atraída hacia el tejado de la escuela coránica donde estudiaba, situada en el sureste del país. Una vez allí, un grupo de asaltantes le pidieron que retirara la denuncia por acoso sexual contra el director del establecimiento.

Pero frente a su negativa la rociaron con gasolina y prendieron fuego. La mujer murió cinco días más tarde, el 10 de abril, como consecuencia de sus heridas.

La policía de Bangladés anunció este miércoles que inculpará a 16 personas por su muerte, entre ellas dos mujeres, compañeros de clase de la víctima.

“Están inculpados en base a la ley sobre violencia contra mujeres y niños y vamos a recomendar la pena de muerte para los 16 acusados”, dijo a la AFP Mohammad Iqbal, el principal investigador del caso.

Según este policía, el director de la escuela coránica (madrasa), Siraj Ud Doula, al que había denunciado, ordenó el asesinato aunque estaba detenido.