Le ponen el casco, en preparación al espectáculo que está a punto de liderar. Su semblante es de firmeza y determinación, como a punto de aplicar el castigo ejemplar ante la más grave falta. Se asegura que hayan varios ángulos tomando el momento.

El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, lo hizo de nuevo. Su más reciente aparición en la televisión de su país ha dado de que hablar fuera de este territorio. El periódico italiano La Repubblica ha difundido también la acción contra el delito que el lider asiático persigue incansablemente.

Manos al bulldozer y, segundos después, un crujido en seco da la idea del inicio de una secuencia en la que queda registrada la destrucción de los más de 60 vehículos y motocicletas de lujo, valorados en 5.5 millones de dólares.

A la provincia de Cagayán, al norte de Manila, Duterte fue acompañado por funcionarios, que según el video se muestran complacidos de lo que ocurre en el sitio escogido por el polémico lider, para mostrarle al mundo su mano dura contra el contrabando en su país.

La Repubblica| Italia
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El repetido “castigo ejemplar”

No es la primera vez que Duterte encabeza una dosis de punición como la recién vista. En febrero pasado, decenas de vehículos habían sido destruidos por evasión fiscal. En esa ocasión, dos docenas de autos de lujos, entre estos: Porsches, Mercedes, Jaguars y Corvettes, estaban en primer plano de la decisión presidencial.

“Dáselo al comprador de acero”, le dijo Duterte en esa ocasión a los funcionarios que estaban al frente de la destrucción de los automotores, cada uno valorado en 15 mil dólares-9.594.600 pesos chilenos-.

“No pueden tener autos así. Pero pueden obtener algo, hacer juguetes con él”, sentenció.

La Repubblica| Italia
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Se trata de una ofensiva al contrabando que el mandatario pretende aplastar, literalmente, la cual según cifras del gobierno filipino, ha permitido la incautación de 2.9 millones de dólares solo en contrabando de vehículos de lujo.

“No vale la pena evadir impuestos en Filipinas, así que podría dejar de intentarlo, porque nunca tendrá éxito”, fueron las palabras del ministro de Finanzas, Carlos Domínguez.

El delito que Duterte combate de la mano de los bulldozer, tiene su razón de ser en la alta tributación en contra de los automóviles extranjeros impuesta por el gobierno local. Lo anterior ha llevado a muchos a eludir las regulaciones tratando de pasar los bienes de contrabando a través de la complicidad de los funcionarios de aduanas.

La Repubblica| Italia
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