China registró en marzo un inesperado déficit comercial de 4.980 millones de dólares, debido a una caída de sus exportaciones contraria a todas las expectativas después de los espectaculares desempeños de los meses anteriores, según los datos oficiales publicados este viernes.

Las exportaciones bajaron el mes pasado un 2,7% interanual, después que en febrero las ventas al extranjero subieran un 44,5%, lo que se sumó a una subida de las importaciones de 14,4%, frente a un alza de 6,3% en febrero.

Esta es la primera vez desde febrero de 2017 que el gigante asiático registra un déficit del comercio exterior, una situación que entonces tampoco se había producido hacía tres años.

Después de que en enero el excedente sumara los 20.500 millones de dólares y en febrero los 33.700 millones, los analistas interrogados por Bloomberg apostaban que el superávit alcanzaría los 27.500 millones de dólares en marzo.

Este cambio brusco en la balanza comercial se explica por la imprevista caída de las exportaciones, en un momento en que los analistas esperaban un alza de 11,8%.

“La mayor parte de esta caída en marzo se debió a elementos estacionales como los largos feriados del Año Nuevo lunar que cayeron más tarde que en 2017, lo que implica perturbaciones hasta marzo”, explicó Julian Evans-Pritchard, analista de la consultora Capital Economics.