Washington y Seúl anunciaron este viernes un acuerdo para la instalación de un escudo antimisiles estadounidense en Corea del Sur, ante la multiplicación de amenazas provenientes de Corea del Norte.

Los dos países empezaron a discutir del despliegue del sistema avanzado THAAD en febrero, un mes después del cuarto ensayo nuclear norcoreano, el 6 de enero.

“En base a esas consultas, el Sur y Estados Unidos decidieron como aliados el despliegue de THAAD (…) como medida de defensa para garantizar la seguridad de Corea del Sur y de su pueblo”, según un comunicado conjunto de los Ministerios de Defensa.

El comunicado no aporta precisiones sobre la fecha del despliegue del sistema antimisiles y añade que los dos países se encuentran en la etapa final para la elección del emplazamiento.

El sistema THAAD lanza misiles concebidos para interceptar y destruir misiles balísticos cuando aún se encuentran justo en el exterior de la atmósfera o bien acaban de entrar en ella, durante la última fase del vuelo.

Este proyecto irrita tanto a Rusia como a China, que reprochan a Washington que quiera hacer una demostración de fuerza en la región.

China condenó este despliegue y afirmó que “perjudicará gravemente” a la seguridad regional.

El comunicado conjunto intenta calmar las tensiones regionales. Una vez instalado, el sistema THAAD sólo responderá a ataques potenciales procedentes de Corea del Norte, recalca el texto.

“Cuando el sistema THAAD esté desplegado en la península coreana, concernirá únicamente a las amenazas nucleares y balísticas emanadas de Corea del Norte, y no estará dirigido contra terceros países”.